LA EXPERIENCIA KIRTAN

Existe una práctica espiritual llamada bhajan que, “es uno de los métodos de concentración en lo Divino más SENCILLOS”. La palabra bhajan, de origen sánscrito y cuya raíz significa ‘compartir’ o ‘adorar’, refiere al canto devocional en el marco del hinduismo.

Al igual que todas las tradiciones espirituales, la filosofía de la India fomenta el canto de los llamados nombres sagrados como una manera de reverencia y acercamiento a lo Divino A fin de cuentas, no se trata de otra cosa que de plegarias con música o mantras.

En este punto, vale la pena recordar que uno de los objetivos de todas las prácticas espirituales es el de concentrar la propia mente en un punto elevado, que nos permita quitar la atención de las cuestiones innecesarias, para así acercarnos a la Divinidad, o si se prefiere, para acercarnos a nuestra verdadera esencia, que yace debajo de toda la vorágine de la mente, siempre abrumada de estímulos externos.

A este respecto, un tipo específico de bhajan es el llamado kirtan (o samkirtan), que viene de la palabra kirti que significa‘fama’,y que en lengua sánscrita se refiere a ‘alabar’ o ‘glorificar’. La característica principal del kirtan es que hay una persona que lidera el canto, enunciando cada verso, mientras el coro repite las palabras, línea por línea. Aunque es importante que haya un guía que lleve la voz cantante, la clave de esta práctica está en la repetición constante y grupal del canto, que porta la vibración devocional a la cúspide merced a la energía colectiva puesta en acción.

“Debido al distanciamiento con la naturaleza, con los demás y con nosotros mismos, nos hemos vuelto socialmente inhibidos e incómodos con nuestros cuerpos y sensaciones, resultando en un tremendo miedo a la hora de hablar o cantar en público. La práctica yóguica del kirtan puede ayudar a remediar este dilema de la vida moderna”.

Sobre el kirtan, dice: “Las palabras de estos cantos nos llevan hacia adentro, y mientras nos entregamos a la experiencia, la experiencia nos cambia. Estos cantos no tienen otro significado que la experiencia que obtenemos al hacerlos. Vienen de la tradición hindú, pero no se trata de ser hindú o de creer nada de antemano. Se trata solamente de hacerlo y experimentarlo. No debes unirte a nada, sólo tienes que sentarte y cantar”.